NOTA (1)
La sátira es un Poema, que reprehende los vicios ridiculizándolos, y siempre que toque sólo a éstos, y no a las personas, que es lo que procuramos, siguiendo el consejo de Marcial: Parcere personis, dicere de vitiis. Epílogo 33 del libro X. Es agradable a los lectores, y según un Escritor Español, lo es aún más que el Poema panegírico, y da por razón: que como la Sátira siempre es verdadera, y carece de la lisonja, o hipérboles, de que (por lo regular) se visten los elogios, de ahí es, que se introduce con más facilidad en el entendimiento.
Muchos y célebres han sido en todos tiempos los Poetas que han escrito en este estilo. Entre los antiguos sobresalieron: Horacio, Juvenal y Persio; entre los modernos: Quevedo, Góngora, Moreto, Gracián etcétera, entre los Españoles; el singular Dante entre los Italianos; Regnier entre los Franceses, y así en otras partes, que pareciera pedantismo poner en lista aún sólo los que han llegado a mi noticia y para lo que intenté persuadir basta lo dicho.
No falta quien, en ayunas de todo esto quiera interpretar siniestramente el sentido de algunos de mis papeles; no falta tampoco, quien diga, que mi pluma corre demasiadamente libre en la materia; y no falta, por fin, quien haciendo misterio de lo que ignora, se espanta de que se permitan publicar mis producciones. A los primeros digo: que se instruyan antes de hablar, y que sepan, que también los herejes saben interpretar a su antojo las Santas Escrituras. A los segundos digo: que cotejen mis sátiras con las de Quevedo, Moreto, y otros, y vean si las de éstos les exceden en honestidad: y a los últimos, que se mosquean tanto (por cuanto temo, que viéndose retratados en los papeles, se quejan como adoloridos) les digo que si no les preguntan, no digan cómo se llaman, que dejen correr la bola, que es prudencia, y se diviertan con el siguiente.
José Joaquín Fernández de Lizardi
Notas del editor UNAM-IIF:
(1) Copia impresa en Austin que aporta Nancy Vogeley en el libro citado en la Nota Editorial.